Yoko Ono la grabó el 8 de diciembre de 1980 horas antes de que un fan desequilibrado asesinara a su marido cuando entraba a su apartamento tras salir del estudio en el que se grabó este bodrio de canción, que tuvo gran éxito debido a la coincidencia. Spiritualized, Pet Shop Boys y Elvis Costello han interpretado este tema discotequero que Ono no podía cantar porque le traía malos recuerdos. Se nota la influencia del Bowie de Ashes to Ashes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario